Cómo conservar las flores frescas: 5 consejos sencillos

Consejo 1: Retira el papel

Los ramos de flores suelen incluir preciosos envoltorios, cintas o elementos decorativos que debemos retirar antes de poner las flores en un jarrón, para permitir que los tallos y las flores "respiren".

Consejo 2: Elige el jarrón adecuado

Asegúrate de elegir el jarrón correcto y eso quiere decir que el jarrón no sea demasiado pequeño para las flores. Los tallos necesitan espacio, no deben quedar aplastados. Las flores solo se mantendrán frescas si hay suficiente espacio y una absorción de agua sin obstáculos.

Consejo 3: agua tibia mejor que fría

Contrariamente a lo que pensamos muchos, a las flores no les gusta el agua fría. Así que te recomendamos que pongas agua tibia en el jarrón, sin llenarlo en exceso. La excepción son las rosas o flores de bulbo, en cuyo caso sí es mejor usar agua fría. El agua debe cambiarse cada día.

Consejo de experto: echa un par de gotas de lejía Conejo en el agua de las flores. Sí, sí, lejía. La lejía es un excelente desinfectante y mantendrá el agua libre de bacterias. 

¿Te vas de vacaciones? No te preocupes. En nuestro artículo Cómo regar las plantas durante las vacaciones te contamos cómo hacerlo. 

Consejo 4: corte en diagonal

Antes de meter las flores en el jarrón, retira las hojas inferiores de los tallos, para que no queden sumergidas en el agua, de lo contrario las hojas se pudren. Y también corta aproximadamente un centímetro de tallo de cada flor, en diagonal. Así las flores aumentan su capacidad de absorber el agua. 

Consejo 5: encuentra la ubicación correcta

Las flores frescas son muy sensibles por lo que debemos elegir un lugar bien iluminado y fresco para colocarlas. Eso sí, los rayos del sol no deben incidir directamente sobre ellas. Tampoco conviene colocar un ramo cerca de radiadores en invierno.

¡Esperamos que con estos consejos tu ramo de flores frescas se mantenga durante más tiempo!