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Durante los meses de invierno, las prendas más calentitas de nuestro armario se convierten en indispensables para salir a la calle. Los gorros, las bufandas o los guantes de lana pasan a ser nuestros complementos estrella en todos los "looks". Pero, a pesar de llevarlos cada día, ¿sabemos cómo lavarlos correctamente? Presta atención a estos consejos para lavar los complementos de lana.
Antes de empezar a lavar revisa las indicaciones de lavado descritas en la etiqueta. Por lo general, en este tipo de prendas no está recomendado el uso en la lavadora. No obstante, hay algunas piezas que sí permiten el lavado a máquina.
- Llena una palangana con agua tibia y añádele un detergente líquido especial para este tipo de prendas. Perlan Cuidado 3D es ideal para lavar lana, ya que cuida de las fibras en 3 dimensiones: mantiene la flexibilidad, previene las pelusas y bolitas y mantiene la forma.
- Introduce tu gorro, bufanda o guantes en la palangana y lávalos con cuidado y con movimientos muy suaves para no dañar el tejido. Te recomendamos no dejarlos a remojo; de ese modo, evitarás que las prendas se encojan. Enjuaga bien para eliminar cualquier resto de espuma.
- Escurre la prenda oprimiéndola muy poco a poco y luego, envuélvela en una toalla. De esta forma conseguirás que se absorba la mayor parte del agua.
- Finalmente, extiende la prenda sobre una superficie plana y deja que se seque. Así, evitarás deformaciones.
- Selecciona el programa de lavado. La mayoría de las lavadoras cuentan con un programa especial para tejidos delicados. Te recomendamos seleccionarlo y no llenar toda la carga. De esta manera, evitarás los roces y que la prenda se estropee.
- Controla la temperatura. Aunque el programa de lavado ya suele estar predeterminado, debes fijarte bien en la temperatura de lavado y en la velocidad del centrifugado. Para evitar el riesgo de que las prendas se estropeen, lava las prendas de lana a menos de 30 grados y a 800 revoluciones como máximo.
- Escoge un detergente especialista. Del mismo modo que para el lavado a mano, nuestro consejo es utilizar un detergente especial para la lana.
- Secado correcto. La mejor manera de secar la ropa de lana es dejarla extendida en horizontal. Hazlo tanto si utilizas lavadora como si lavas a mano.
La frecuencia de lavado variará según las veces que te las pongas.
- Gorro: por lo general, no suele ensuciarse demasiado. Tan solo deberías prestar más atención si sudas bastante o si sufres algún tipo de patología en la piel. Por lo general, puedes lavarlo una vez cada dos semanas.
- Bufanda: nuestra recomendación es lavarla una vez cada dos semanas. En caso de que se la prestes a alguien, lávala antes de volver a usarla para evitar el contagio de posibles gérmenes.
- Guantes: los guantes son el complemento de invierno más complicado. Con ellos tocamos todo lo que nos rodea y, por ello, acumulan muchas más bacterias que cualquier otro. Como recomendación, evita llevarlos puestos durante el desplazamiento en transporte público y lávalos cada semana.
Para un lavado óptimo de invierno descubre los trucos para secar la ropa dentro de casa. Por último, cuando finalice el invierno y quieras guardar tus prendas hasta el próximo año, primero deberías lavarlas. De ese modo, evitarás que la suciedad penetre en el tejido y la prenda coja malos olores.
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