Colágeno para el pelo: ¿cuál es su función y cómo aplicarlo?

El colágeno es una de las proteínas más importantes de nuestro cuerpo. Representa más de un 25 % de todas las proteínas presentes en nuestro organismo, y cumple funciones esenciales, como mantener la piel firme y saludable, fortalecer las uñas, las articulaciones, los dientes y también el cabello. Aunque nuestro organismo produce colágeno de forma natural, esta producción disminuye a partir de los 25 años, lo que puede resultar en una piel menos elástica, un cabello más débil y, en definitiva, los primeros signos de envejecimiento.

Para entender cómo beneficia el colágeno al cabello, es importante saber que esta proteína se descompone en aminoácidos en el cuerpo. Estos aminoácidos, también proteínas, participan activamente en la producción y el funcionamiento adecuado de la queratina, el principal componente del cabello. Si el cuerpo carece de colágeno, también puede haber deficiencia de aminoácidos, lo que hace que el cabello sea frágil y propenso a dañarse.

Sí, el colágeno es beneficioso tanto para la piel como para el cabello. Un suministro adecuado de colágeno aporta concretamente los siguientes beneficios:

• El colágeno combate los radicales libres, lo que fortalece el cabello y ayuda a reparar daños desde el interior.
• El colágeno previene la aparición de canas o ralentiza el proceso de encanecimiento al combatir los radicales libres. Estos afectan a la producción de melanina, el pigmento que da color al cabello. 
• El colágeno mejora la elasticidad del cabello, haciéndolo menos propenso a romperse.
• El colágeno puede estimular un crecimiento más rápido y saludable del cabello, fortalece las raíces y ayuda a reducir o prevenir la caída del cabello. Nota importante: la caída del cabello puede tener múltiples causas, por lo que consumir colágeno puede ser un complemento, pero no una solución en todos los casos.

Si deseas aportar colágeno adicional a tu piel y cabello, existen varias opciones:

Por un lado, puedes incluir en tu dieta alimentos que estimulen la producción natural de colágeno en tu cuerpo, como frutos secos, lentejas y otras legumbres, así como frutas y verduras ricas en vitamina C. Otra opción es consumir alimentos ricos en colágeno, como carne, pescado o caldo de huesos, ya que el colágeno es de origen animal y no está presente en alimentos vegetales. 

Otra opción para añadir colágeno es mediante suplementos que puedes encontrar en farmacias, supermercados o tiendas de nutrición. Estos suelen estar enriquecidos con nutrientes adicionales que también son beneficiosos para el cabello y la piel.

Si prefieres no tomar suplementos, pero aun así quieres aprovechar los beneficios del colágeno en tu cabello, puedes optar por champús, acondicionadores o mascarillas que contengan esta proteína. Con un uso regular, estos productos pueden ayudar a fortalecer y embellecer el cabello.

Por último, existen otros productos que también cuidan y reparan el cabello dañado tanto como las soluciones con colageno. La línea de cuidado con queratina de Syoss, por ejemplo, ayuda a suavizar y fortalecer el cabello débil, mientras que la gama Hidratación+ de Syoss ofrece productos específicos para cabello seco o dañado. También puedes probar el champú Total Repair de Gliss, que ofrece una reparación profunda y contiene queratina hidrolizada y néctar floral.